
Vigilancia de resistencias antimicrobianas en alimentos
Se estima que las resistencias son responsables de 25.000 muertes al año en la Unión Europea. También causan pérdidas económicas de 1.500 millones de euros por el incremento del coste de tratamientos médicos y pérdida de productividad.
El empleo de antimicrobianos, como los antibióticos, en los animales y en el hombre es uno de los factores que contribuyen a la aparición de resistencias, definidas como la disminución o pérdida de eficacia de esos medicamentos para combatir las infecciones causadas por bacterias.

Si no se actúa de forma inmediata los antibióticos pueden dejar de curar.
Dos de los mayores problemas de salud pública y sanidad animal son la pérdida de eficacia y la escasez de tratamientos alternativos.
Qué es la resistencia a los antimicrobianos
La resistencia es la capacidad de una bacteria para sobrevivir y reproducirse ante la presencia de un antibiótico.
Qué son los antimicrobianos
Son fármacos empleados para combatir los microorganismos (bacterias, virus, hongos o parásitos), ya sea eliminándolos de forma directa o reduciendo su capacidad de multiplicación.
Se emplean tanto en las personas como en los animales.
Los antibióticos son un grupo muy importante que se emplean para combatir las infecciones causadas por bacterias.
Cómo se produce la resistencia
La resistencia se produce por un mecanismo natural de las bacterias:
Las bacterias son seres vivos y a lo largo del tiempo han desarrollado mecanismos para adaptarse a las situaciones perjudiciales.
El elevado e incorrecto empleo de antibióticos en el hombre y en los animales está potenciando este mecanismo. Es un efecto secundario indeseado.
Resistencia natural:
Es aquella propia del género o especie bacteriana, por ejemplo la resistencia a la vancomicina en bacilos Gram negativos o la resistencia a la penicilina en enterobacterias.
Resistencia adquirida:
Puede aparecer por mutaciones del material genético de la bacteria.
Puede transmitirse entre bacterias mediante unos elementos móviles denominados plásmidos. Cuanto mayor sea el número de bacterias resistentes en un entorno, mayor será la probabilidad de que se produzca.
Clasificación de bacterias según sus resistencias
Multirresistente (MDR):
Patógeno resistente a por lo menos 3 clases de antimicrobianos a las que habríamos esperado que fuera susceptible.
Por ejemplo, el Staphylococcus aureus resistente a la meticilina (SARM). Se calcula que los pacientes con infecciones por SARM tienen una probabilidad de morir un 64% mayor que los pacientes con infecciones no resistentes.
Extensamente resistente (XDR) :
Sólo quedan 1 o 2 opciones de antimicrobianos frente a los cuales el microorganismo es susceptible.
Por ejemplo, se han producido muertes por Klebsiella pneumoniae (una bacteria intestinal común) cuando es resistente al tratamiento utilizado como último recurso (los antibióticos carbapenémicos). Esto puede suponer un problema muy grave cuando se infectan los pacientes ingresados en unidades de cuidados intensivos. .
Panresistente (PDR):
Patógeno resistente a todos los agentes antimicrobianos comercialmente disponibles.
Al administrar antibióticos a los animales de forma incorrecta se eliminan la mayoría de las bacterias, permaneciendo sobre todo aquellas que tienen una mayor resistencia al fármaco.
Los animales, al igual que el hombre, contienen bacterias saprófitas (no patógenas) en el intestino.
Cuando el uso de los antimicrobianos es inadecuado, estas bacterias se multiplican, aumentando así la proporción de bacterias resistentes.
Qué nos dicen los estudios realizados
- Los antibióticos se utilizan en las granjas de animales que producen alimentos para tratar las infecciones.
- El uso excesivo de los antibióticos elimina su efectividad.
- Las resistencias a los antimicrobianos están extendidas en las granjas de aves y de cerdos de Europa.
- La resistencia puede transmitirse a las personas a través del contacto con animales portadores de bacterias resistentes.
El empleo excesivo o inadecuado de antibióticos en las personas tiene un papel importante en el aumento de resistencias.
Estas son las principales vías:
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Tratamiento con antibióticos en el hogar o en el ámbito hospitalario.
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Por transmisión entre personas: las personas que tienen bacterias resistentes las transmiten a otras principalmente a través de las manos (contaminando objetos y alimentos), pero también puede suceder por otras vías (secreciones respiratorias, orina, etcétera).
Por ejemplo, se ha asociado el tratamiento con cefalosporinas de tercera y cuarta generación en personas infectadas por E. coli con la detección de resistencias a esos antibióticos,
Hay varias vías por las que las bacterias resistentes pueden llegar al hombre a partir de los animales:
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Contacto directo entre los animales y el hombre:
Por ejemplo, los granjeros, los veterinarios o los visitantes de las granjas.
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Consumo de alimentos de origen animal que contienen bacterias resistentes
En el matadero, si no se manipulan correctamente los animales, puede contaminarse la carne con el contenido del intestino que contenga bacterias resistentes.
Si consumimos esa carne sin cocinar completamente, pueden quedar bacterias vivas que nos transmitan la resistencia.
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Contaminación a través del agua:
El empleo de aguas contaminadas con bacterias fecales resistentes, puede contaminar vegetales, frutas o mariscos.
En las granjas con una canalización de aguas puede contaminar el medio ambiente o los abonos empleados en agricultura.
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Contaminaciones cruzadas:
Las bacterias resistentes pueden diseminarse en las explotaciones ganaderas, los mataderos, las industrias que elaboran alimentos e, incluso, en el hogar.
La comida se puede contaminar a partir de bacterias resistentes que haya en el medio ambiente, por contacto con superficies contaminadas y pasar de la carne a una comida preparada, por ejemplo.
Una salud única contra las resistencias antimicrobianas
Entre 2011 y 2016, la Comisión Europea aplicó un plan que contenía 12 medidas.
Para valorar los resultados de esas medidas, en 2015 se publicó un informe sobre resistencias antimicrobianas elaborado por tres agencias europeas:
- La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) , que proporciona asesoramiento y apoyo científico independiente.
- La Agencia Europea del Medicamento (AEMA) que realiza el seguimiento y evaluación de los riesgos para la salud humana y animal.
- El Centro Europeo de Prevención y Control de enfermedades (ECDC).
Una de las conclusiones fue que para reducir la resistencia hay que luchar en tres frentes simultáneos: la salud humana, la salud animal y el medio ambiente.
Programa de vigilancia de resistencias en alimentos

Es necesario conocer las resistencias de las bacterias que se transmiten al hombre por consumo de alimentos.
Por ello, cuando se detectan unas bacterias concretas en los alimentos, se investiga si presentan resistencias antimicrobianas.
¿Por qué todos los países europeos vigilan las resistencias en alimentos?
Para obtener información armonizada que permita hacer comparaciones entre países y a lo largo del tiempo.
De esta forma se puede conocer el alcance del problema (análisis del riesgo), informar a todos los agentes implicados (comunicación del riesgo) y adoptar medidas y estrategias (gestión del riesgo) y valorar si son eficaces.
¿Cómo se hace la vigilancia?
Analizando las cepas de los agentes zoonóticos que aislamos de los alimentos de origen animal.
Estas cepas proceden del ganado vacuno, porcino y de las aves de corral, así como de los alimentos obtenidos de estas especies (carne, huevos).
¿En qué cepas se investigan las resistencias?
- En las bacterias que producen un mayor número de casos de zoonosis alimentarias (que producen enfermedades al hombre):
- Salmonella spp. Esta bacteria es la que se detecta preferentemente en brotes de intoxicación alimentaria.
- Campylobacter: C. jejuni y C. coli. Se trata de la zoonosis alimentaria más frecuente en Europa.
- En bacterias comensales (que están presentes en el tracto digestivo sin producir enfermedades). Se decide investigarlos porque están en mayor número en los animales que las anteriores. Eso permite conseguir mayor cantidad de cepas y estudiar su comportamiento:
- Escherichia coli comensal
- Enterococcus: Enterococcus faecalis y Enterococcus faecium
- En Salmonella y Escherichia coli productoras de las siguientes enzimas:
- Betalactamasas de espectro ampliado (BLEA).
- Betalactamasas tipo AmpC.
- Carbapenemasas.
Esas enzimas confieren resistencia a la bacteria frente a una gran variedad de antibióticos como los derivados de la penicilina, las cefalosporinas, los monobactámicos y los carbapenémicos. Por tanto, las bacterias que producen esas enzimas presentan un gran desafío para la salud clínica en humana y animal.
Estos grupos de bacterias presentan facilidad para adquirir genes de resistencia, así que son útiles para relacionar los niveles de resistencia con el uso de antimicrobianos en los animales dedicados a la producción de alimentos.
La Comunidad de Madrid analiza anualmente alrededor de 400 muestras de alimentos para la vigilancia de las resistencias a los antimicrobianos de los agentes zoonóticos aislados en los alimentos de origen animal.
Resultados de la vigilancia
Los resultados de esta vigilancia se incluyen cada año en el “Informe Sumario de la Unión Europea sobre resistencia a los antimicrobianos en bacterias zoonóticas e indicadoras procedentes de humanos, animales y alimentos”.
Principales conclusiones:
- A pesar de las medidas aplicadas en años anteriores, las bacterias encontradas en las personas, los animales y los alimentos siguen presentado resistencias antimicrobianos de uso frecuente.
- Los niveles de resistencias son muy diferentes en los países de la Unión Europea, siendo más elevados en el Sur y Este de Europa, lo que parece asociado al uso de los antimicrobianos. Por ejemplo, los países que han adoptado medidas para reducir su uso en animales tienen mejores resultados.
- Las bacterias que causan toxiinfecciones alimentarias con mayor frecuencia, como Salmonella y Campylobacter:
- Muestran una resistencia significativa a antimicrobianos comunes en humanos.
- No obstante, la resistencia combinada (co-resistencia) a antimicrobianos críticamente importantes es baja,
- Por tanto, actualmente se dispone de opciones terapéuticas para la mayoría de las infecciones graves debidas a bacterias zoonóticas.
Salmonella:
Las resistencias son diferentes:
- Según el serotipo. Por ejemplo, los serotipos Typhimurium, Virchow, Derby y Newport suelen ser resistentes o multirresistentes, mientras que S. enteritidis raramente presenta un fenotipo multirresistente.
- También se observan diferencias en cuanto al alimento de procedencia: la resistencia a la ciprofloxacina es más elevada en la Salmonella aislada en la carne de pollo; mientras que la resistencia a las cefalosporinas es más frecuente en la carne de cerdo.
Campylobacter:
- Al analizar carne de pollo es frecuente detectar resistencia a las fluoroquinolonas, tanto en C. jejuni (95%), como en C. coli (85%). Mientras que el porcentaje de cepas de C. jejuni resistentes a la ciprofloxacina varía mucho de un país a otro, los niveles de resistencia en C. coli permanecen constantes.
- Cabe destacar que la resistencia combinada a dos o más antimicrobianos es, en general, bastante baja.
E. coli comensal:
- Puede ser una fuente importante de genes de resistencia.
- Las infecciones causadas por E. coli multirresistentes son de gran importancia para la salud pública.
- Se ha demostrado la transmisión de los genes de resistencia entre cepas humanas y animales y entre cepas de E. coli comensales y otros patógenos de la familia de las Enterobacteriaceae.
Medidas de prevención en la cadena alimentaria
La aplicación de unas medidas preventivas adecuadas impide la diseminación de las bacterias resistentes a los antimicrobianos a lo largo de toda la cadena alimentaria.
Medidas preventivas en la producción primaria
En la fase de la producción primaria, las medidas de prevención se deben centrar en el buen uso de los medicamentos veterinarios, por ejemplo:
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Administrar antibióticos a los animales únicamente bajo supervisión veterinaria.
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No utilizar antibióticos para promover el crecimiento ni para prevenir enfermedades.
- Vacunar a los animales para reducir la necesidad de antibióticos y usar las alternativas posibles.
Además, es importante aplicar medidas de limpieza, desinfección y bioseguridad en las explotaciones ganaderas, que forman parte de los planes de prevención de diseminación de las bacterias resistentes.
La detección rápida de animales enfermos o que presenten resistencias antimicrobianas favorece su separación y su aislamiento del resto.
Medidas preventivas en los mataderos
- Separar, en el espacio o en el tiempo, los animales que llegan con un diagnóstico positivo a un patógeno, empezando desde las zonas de estabulación y continuando por las líneas de faenado.
- Impedir la contaminación cruzada de la carne a partir de la piel (por contacto durante el desollado) y del contenido digestivo (durante la evisceración): así se evita la diseminación de bacterias resistentes.
Medidas preventivas en las industrias
En las industrias se deben implantar unas buenas prácticas de manipulación que eliminen o minimicen la contaminación del producto final, entre las cuales destacar:
- La separación entre el alimento crudo y el producto terminado.
- El envasado eficiente que evite el desarrollo de las bacterias.
- El control de la temperatura de los alimentos: un calentamiento suficiente, un enfriamiento rápido y la conservación en refrigeración o congelación del alimento.
Prevención en el hogar y en los establecimientos de restauración
Tanto en los establecimientos de restauración como en el hogar, las cinco claves para minimizar la contaminación (incluida la producida por bacterias resistentes) son las siguientes:
- Mantener la limpieza:
- Lavarse las manos antes y durante la preparación de alimentos, así como después de usar el baño.
- Lavar y desinfectar todas las superficies y equipos usados al preparar los alimentos.
- Separar los alimentos crudos de los cocinados para evitar la diseminación de bacterias resistentes.
- Cocinar completamente los alimentos, para asegurar que se destruyen las bacterias que puedan contener.
- Conservar los alimentos a temperaturas seguras para evitar que se multipliquen las bacterias resistentes.
- Usar agua y alimentos seguros, para evitar contaminaciones iniciales de bacterias resistentes.
Normativa y enlaces de interés
Los resultados sobre las resistencias a los antimicrobianos de todos los países miembros de la Unión Europea se pueden consultar en estos enlaces:
- The European Union summary report on antimicrobial resistance in zoonotic and indicator bacteria from humans, animals and food in 2015.
- ECDC/EFSA/EMA second joint report on the integrated analysis of the consumption of antimicrobial agents and occurrence of antimicrobial resistance in bacteria from humans and food-producing animals.
-
Herramienta interactiva para la visualización de los datos de antibiorresistencias correspondientes a 2017 en la Unión Europea (en inglés). Representa simplificadamente por países los datos del año 2017 relativos a la resistencia de Salmonella, E. Coli y Campylobacter obtenidos de tres fuentes diferentes: en animales vivos, alimentos y personas.
- Real Decreto 1940/2004 (traspone Directiva 2003/99/CE), obliga a las autoridades competentes a:
- Recopilar y analizar datos sobre la resistencia de los antimicrobianos desarrollada por los agentes zoonóticos presentes en los alimentos y los animales,
- Enviar esa información anualmente a la la Comisión Europea para la elaboración del informe europeo de Informe Sumario Comunitario de Fuentes y Tendencias de los Agentes zoonóticos y de las Resistencias a los Antimicrobianos.
- Realizar la investigación epidemiológica de los brotes de enfermedades transmitidas por los alimentos.
- Decisión 2013/652/UE sobre el seguimiento y la notificación de la resistencia de las bacterias zoonóticas y comensales a los antibióticos.
Las encuestas más recientes sobre resistencias:
- Percepción pública de los riesgos asociados a la resistencia a los antimicrobianos. EFSA . Esta encuesta revela que los ciudadanos (se encuestó a 3000 en varios países europeos) tienen poco conocimiento sobre el problema. También se encuestó a 60 ganaderos y veterinarios, que habían observado la pérdida de eficacia de antibióticos en pollo y cerdos.
- Asociación entre resistencia a antibióticos y serotipos en Salmonella de transmisión alimentaria. (REMASP. 2020; 4)
- Uso racional de antibióticos (Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid).
- Programa Marco para el Control de las Resistencias a los Antimicrobianos en la Comunidad de Madrid (RESISTE).
- Plan de Prevención y Control frente a infecciones causadas por Enterobacterias Productoras de Carbapenemasas (EPC)
- Plan Nacional de Resistencia a Antibióticos.
- Joint Action Antimicrobial Resistance and Healthcare-Associated infections.
- Agencia española del medicamento: Plan estratégico y de acción para reducir el riesgo de selección y diseminación de la resistencia a los antibióticos.
- Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA).
- Organización Mundial de la Salud (OMS).
- Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).