Nuestro hospital Materno-Infantil ha sido conocido durante mucho tiempo como la popular Maternidad de O’Donnell, que tiene su antecedente remoto en la Casa de Maternidad de Madrid, cuyo origen se remonta a 1837. En 1859 el edificio de la Casa de Maternidad fue ampliado y se decidió su traslado desde el barrio de Chamberí hasta la calle Mesón de Paredes, desde donde se extendió por todo Madrid su fama y prestigio.
Para adecuarse a las necesidades asistenciales y las adecuadas condiciones de salubridad e higiene, se construyó el edificio de la calle O’Donnell, cuya primera piedra se puso en 1934. Tras el parón motivado por la Guerra Civil, se retomó el proyecto en los años cuarenta, inaugurando el edificio en la nochebuena de 1956.
Desde entonces y hasta su sustitución por el actual Hospital Materno-Infantil sus instalaciones han alumbrado el nacimiento de más de 300.000 madrileños.
Por otra parte, el antecedente del Hospital Infantil se situó en la antigua Inclusa de Madrid (1.800). En ella se atendían fundamentalmente a los niños que habían nacido en la Casa de la Maternidad. La inclusa contaba con una enfermería que fue el germen del Hospital Infantil.
En mayo de 1969 se inaugura el Hospital Infantil y ya cuenta en ese momento con una capacidad de 50 camas. En la década de los ochenta se incorporan camas para Neonatología. Desde sus inicios, el Hospital Infantil se sitúa a la vanguardia en el desarrollo de la Pediatría y sus especialidades.