El objetivo del equipo de Medicina Intensiva es atender de forma integral a pacientes que se encuentren en situación crítica actual o potencial y que tengan posibilidades razonables de recuperación.
Los pacientes más graves y con mayor riesgo ingresan en la Unidad de Cuidados Intensivos, conocida a menudo por sus siglas, UCI. Sin embargo en algunas ocasiones, estos enfermos se encuentran ingresados en otras áreas del hospital, a las que el equipo de Medicina Intensiva acude para poder atender para realizar el diagnóstico y/o el tratamiento.
Esta atención se realiza las 24 horas del día, los 7 días de la semana, a demanda y en colaboración con el resto de especialidades médicas y quirúrgicas y con los servicios de diagnóstico del centro.
Una parte importante del servicio de medicina intensiva está relacionada con la información sobre la evolución clínica del paciente que se le proporciona a él, siempre que sea posible, y a su familia. Se establece de esta forma una comunicación continua y se procura el mayor bienestar posible durante el ingreso en la UCI.