
Gripe aviar
La gripe aviar es una enfermedad vírica que afecta principalmente a las aves de corral y a las aves acuáticas silvestres. Conozca las medidas preventivas más importantes.
Aspectos básicos
Transmisión a personas
Las personas pueden contagiarse por:
- Contacto directo (el más frecuente).
- Superficies contaminadas.
- Aerosoles y gotitas.

Fuente: CDC (https://www.cdc.gov/bird-flu/media/pdfs/2024/07/avian-flu-transmission-spanish.pdf)
Medidas preventivas
Medidas para la población general
La población en general no necesita adoptar ninguna medida de precaución, salvo:
- evitar el contacto con aves silvestres,
- en caso de encontrarse algún ave enferma o muerta, comunicarlo a las autoridades veterinarias de la Comunidad de Madrid para proceder a su retirada y análisis.
Medidas a adoptar por cazadores
Se recomienda no manipular aves silvestres y otros animales que muestran signos evidentes de enfermedad o que se han encontrado muertos. También debe evitarse comer, beber o fumar mientras se limpian o manipulan las piezas de caza.
En ningún caso se recomienda el enterramiento de cadáveres, debido a la posibilidad de contaminación del equipamiento que se emplee. Además, el enterramiento se debe realizar a cierta profundidad (para evitar el acceso de carroñeros o el riesgo de contaminación del ambiente) y a una distancia prudencial de cualquier masa de agua.
Retirada de aves muertas
Es recomendable que la retirada de aves muertas la realice personal profesional convenientemente dotado de equipos de protección individual. Si es necesaria la manipulación de pequeñas aves muertas (por ejemplo, gorriones), las recomendaciones son:
- Usar material de protección: mascarilla y guantes desechables.
- Recoger el cadáver empleando una primera bolsa de plástico vuelta del revés (lo que introduce una doble capa de protección entre la piel y el cuerpo del ave) y cerrarla.
- Retirar los guantes y la mascarilla evitando el contacto con la parte externa y depositarlos junto con la primera bolsa en una segunda bolsa de plástico.
- Evitar todo contacto con superficies o elementos del ambiente que puedan estar contaminados.
- Eliminar el ave muerta como residuo sólido urbano.
- Lavarse las manos con jabón de forma exhaustiva.
En el caso de quienes mantienen aves en cautividad
- Mantener a las aves fuera de su domicilio y siga unas adecuadas prácticas higiénicas, en particular, mediante el lavado de manos con jabón tras tener contacto con las aves o sus excrementos.
- Nunca sacrificar aves enfermas moribundas, ni consumir su carne.
- Evitar que los niños jueguen con las aves.
En todo caso:
- Seguir las instrucciones de las autoridades competentes de sanidad animal, sobre todo en lo que se refiere a las posibles instrucciones de confinar en instalaciones cerradas a las aves.
- Notificar a las autoridades de sanidad animal cualquier incremento inusual en el número de aves muertas o enfermas. Ante esta situación, no tocar ni manipular los cadáveres o a las aves enfermas.
- Informar de los riesgos y facilitar la toma de medidas preventivas a las personas que entren en contacto regular con las aves domésticas (trabajadores de la explotación, veterinarios) o con las aves silvestres (cazadores, observadores de aves…).
Recomendaciones para personal de explotaciones avícolas, núcleos zoológicos con aves en cautividad o semilibertad y granjas de visones
- Las empresas que gestionan estos establecimientos, a través de sus servicios de prevención de riesgos laborales, deben:
- Proporcionar instrucciones escritas a los trabajadores en relación con los riesgos para la salud y las precauciones que deberán tomar para prevenir la exposición.
- Facilitar el uso adecuado de ropa y equipos de protección individual (EPIs) e instrucciones sobre las técnicas adecuadas para ponerse, quitarse y retirar los EPIs sin contaminarse.
- Contar con procedimientos adecuados de trabajo y medidas de vigilancia y monitorización de la salud.
- En la explotación, se deben seguir las prácticas de bioseguridad para mantener a los animales de la explotación libres de gripe aviar y evitar la transmisión de la infección a las personas expuestas, en caso de que se produzca un foco.
- Se recomienda la vacunación anual frente a la gripe estacional para las personas con exposición frecuente a aves (como trabajadores de explotaciones avícolas o núcleos zoológicos con aves, aficionados a actividades de avicultura o colombicultura) o a visones. Esta medida reduce la oportunidad de una infección humana simultánea por gripe humana y gripe aviar, limitando así la posibilidad de que se produzca una reorganización genética entre ambos virus.
Advertencia: la vacuna de la gripe estacional no protege necesariamente contra la infección del virus de la gripe aviar y, por tanto, los trabajadores expuestos a aves infectadas que reciban la vacuna deben mantener siempre las medidas de protección individual.
Medidas ante un foco declarado
Si hay un brote de influenza aviar de alta patogenicidad en la zona:
- Las autoridades pueden imponer restricciones temporales al movimiento de aves y prohibir el acceso del público a ciertas zonas. Es importante seguir rigurosamente estas instrucciones para evitar la diseminación del virus y prevenir el contagio.
- En estas áreas, los gatos domésticos deben mantenerse confinados en los domicilios para evitar que contacten con aves infectadas o sus excrementos. De este modo, no solo se evita que los gatos se infecten, sino también que diseminen el virus.
En principio, la declaración de un foco de gripe aviar en aves de corral en cautividad conlleva, por parte de la autoridad competente en materia de sanidad animal, la prohibición de movimiento de animales, productos de origen animal destinados al consumo humano y subproductos (no destinados al consumo humano).
Con todo, la misma autoridad competente en materia de sanidad animal puede autorizar ciertas excepciones si se cumplen unos estrictos requisitos.
| Producto | Condiciones |
|---|---|
| Aves vivas |
Se podrán enviar las aves de explotaciones libres de gripe aviar para su sacrificio a un matadero situado lo más cerca posible de la explotación de origen (preferentemente, dentro de la zona restringida). Los servicios de sanidad animal comprobarán, en las 48 horas previas al traslado, que las aves no presentan signos o lesiones compatibles con la enfermedad y, en el caso de explotaciones de la zona de protección, supervisarán la carga y precintarán el medio de transporte. El traslado se realizará directamente hasta el matadero designado (sin descargas ni paradas). |
| Carne fresca de aves de corral procedente de la zona de protección |
La carne fresca de aves de corral no podrá destinarse a otro Estado miembro de la Unión Europea y deberá marcarse, desde el momento en el que se obtiene en el matadero, con una marca de identificación específica del tipo::
|
| Carne fresca de aves de corral procedente de la zona de vigilancia | Se puede autorizar su traslado sin necesidad de marcado especial, ni de destinarla a un establecimiento que la someta a un tratamiento de reducción del riesgo. |
| Huevos para consumo humano | Se puede autorizar su traslado a un centro de embalaje (siempre que se emplee un embalaje desechable o bien que pueda limpiarse y desinfectarse de manera que inactive el virus) o a un centro de elaboración de ovoproductos. |
Medidas de protección establecidas para las personas que trabajan en granjas que puedan estar expuestas a un foco de gripe aviar
Los Servicios de Prevención de Riesgos Laborales (SPRL) notificarán a salud pública todas las actuaciones que se describen a continuación en relación con la salud humana:
- Vigilancia de síntomas compatibles: se elaborará un listado con todos los trabajadores expuestos al foco de gripe aviar, a los que se realizará seguimiento desde la notificación del foco y durante 14 días desde la finalización de las labores de sacrificio, limpieza y desinfección, con el objeto de detectar precozmente cualquier síntoma de infección respiratoria similar a un síndrome gripal.
- Cribado de personas expuestas, para detectar casos asintomáticos: se realizará toma de muestra orofaríngea para una prueba PCR (reacción en cadena de la polimerasa) a todas las personas expuestas (a aves infectadas o ambientes contaminados).
La rápida actuación tras un diagnóstico de sospecha está orientado a un adecuado control. El riesgo de padecer gripe aviar tras la exposición laboral se considera "muy bajo".
