
Hepatitis B
La hepatitis B es una enfermedad infecciosa causada por el virus de la hepatitis B (VHB), que produce afectación del hígado.
Qué es la hepatitis B
La hepatitis B es una enfermedad infecto-contagiosa que causa alteraciones en el hígado. Produce una infección aguda que en ocasiones persiste y provoca una enfermedad crónica, que con el tiempo puede producir cirrosis (cicatrización) del hígado, cáncer de hígado y otras enfermedades hepáticas.
El virus de la hepatitis B se transmite a través del contacto con sangre u otros líquidos corporales, pinchazos, tatuajes, perforaciones y exposición a sangre o líquidos corporales infectados como la saliva, el semen y el flujo vaginal y menstrual.
También es posible la transmisión de la enfermedad madre-hijo durante el parto.
Síntomas, diagnóstico y tratamiento
Síntomas
La sintomatología tras entrar en contacto con el virus de la hepatitis B y contagiarse puede ser muy variada: desde no tener ningún síntoma hasta presentar cansancio, fiebre, vómitos, malestar general, orina oscura, heces pálidas y el síntoma más característico: la ictericia (color amarillento de la piel).
La mayoría de las infecciones por hepatitis B son auto limitadas, pero entre un 5-10% se cronifican, pudiendo llegar a desencadenar una cirrosis hepática o un carcinoma hepático, lo que podría precisar un trasplante hepático.
Diagnóstico
El diagnóstico se realiza mediante análisis de muestra de sangre.
Tratamiento
Es importante observar unas medidas dietéticas entre la que se incluyen una dieta pobre en grasas y la restricción de sustancias potencialmente dañinas como alcohol y medicamentos.
Existen distintos tratamientos según la fase en la que se encuentre la enfermedad. En los casos de hepatitis crónica se administran diferentes tipos de tratamientos según el grado de afectación y la evolución.
Prevención
La vacunación es la medida más importante para prevenir la transmisión de la Hepatitis B. Por ello se incluye su vacunación en el calendario de vacunación para toda la vida de la Comunidad de Madrid, tanto en la infancia como en personas adultas con un riesgo personal u ocupacional de adquirir la infección o de desarrollar complicaciones tras la infección.
Asimismo, se recomiendan medidas higiénicas que impliquen evitar el contacto con sangre o fluídos corporales de una persona infectada con el virus de la Hepatitis B. Estas medidas contemplan el uso de preservativo en las relaciones sexuales, no compartir material de aseo personal, cubiertos ni otros objetos personales.