Grifo con una gota sobre un vaso con agua

Agua de consumo

Un agua bien tratada y desinfectada con productos autorizados, garantiza al consumidor la ausencia de riesgos en el consumo de agua potable.

Por el contrario, un mal tratamiento, almacenamiento, distribución del agua, o una ausencia de desinfección, puede originar la presencia de microorganismos, parásitos o sustancias no deseables, que ocasionan diarreas, náuseas, vómitos, fiebre, dolores abdominales, etc. en el ser humano. Gran parte del agua de grifo consumida en nuestra región proviene del Canal de Isabel II.

Ondas en el agua con una gota central
La COVID-19 no se transmite por el agua de consumo

Los estudios disponibles, según la OMS, demuestran que el coronavirus no se transmite por el agua. El agua se desinfecta con cloro antes de su distribución, de forma que sea apta para el consumo.

Por lo tanto, el agua distribuida en la Comunidad de Madrid por el Canal de Isabel II y otras entidades no entraña riesgo para la salud de la población.