Es un servicio clínico que presta atención sanitaria y técnica a pacientes oncológicos. Inició su actividad en 1968 con unidades de telecobaltoterapia que ha ido renovando y ampliando sus recursos técnicos hasta la dotación actual con cuatro aceleradores lineales, TAC propio para obtención de imágenes para planificación y simulación de tratamientos, todo ello conectado a través de una red de gestión instrumental, que garantiza la seguridad y fiabilidad de los tratamientos radioterápicos.
Trabaja en relación con la unidad de Radiofísica Hospitalaria, responsable de la dosimetría individualizada del tratamiento de cada paciente y de la verificación instrumental. Dispone de quirófano propio para técnicas de braquiterapia de alta y baja tasa de dosis y para cirugías de alta complejidad, que requieren la administración de Radioterapia Intraoperatoria (RIO).
Al ser el cáncer un tratamiento multidisciplinar, este servicio colabora con todos los servicios médicos y quirúrgicos del hospital implicados en diagnóstico y terapéutica oncológica tanto intrahospitalarios como de hospitales que no disponen de radioterapia, con mención especial para servicios como Radiodiagnóstico y Medicina Nuclear, que permiten mejorar la planificación de los tratamientos mediante imágenes de fusión, RM y PET-TC principalmente.
Entre sus objetivos figuran la aplicación de todos aquellos avances que permite la tecnología radioterápica disponible para lograr el objetivo de alcanzar la máxima dosis de radiación tumoral, preservando al máximo las estructuras sanas peritumorales y la optimización de la calidad en todas sus actividades.
