Los Jardines de los Palacios de la Finca Vista Alegre
Los Jardines de los Palacios de la Finca Vista Alegre
Los Jardines de los Palacios de la Finca Vista Alegre

Los Jardines de los Palacios de la Finca Vista Alegre

Bien de Interés Cultural en la categoría de Jardín Histórico.

Los Carabancheles fueron desde el siglo XVIII lugar predilecto de la alta burguesía y la nobleza madrileña para la instalación de quintas o fincas de recreo, por su cercanía a la ciudad y por su posición despejada que les proporcionaba un clima más saludable y bellas vistas del conjunto urbano.

Declaración de Bien de Interés Cultural

Valores que justifican la declaración del bien_02

Valores que justifican la declaración del bien_03

De las cinco norias que tuvo la Finca Vista Alegre en época del marqués de Salamanca, dos de ellas se ubican en el área definida como los Jardines de los Palacios, de las que se conservan restos importantes. Se trata de la Noria de Bella Vista, junto a la casa de este nombre y la Noria de Navarro, junto a la Casa de Dependientes, asociada a su vez a una acequia y estanque.

En el perímetro de los Jardines de los Palacios se conservan varios tramos de la cerca original decimonónica de ladrillo visto en la calle del Blasón, la calle de Arnedo y las medianeras con las propiedades de la calle del Neblí. También se conserva en la calle del Blasón, con funciones de tapia, la zona inferior de la fachada de la antigua Casa de Administración.

La Puerta Bonita, situada hoy en manzana colindante a la Finca Vista Alegre, es una reconstrucción fiel de la realizada por Francisco Sánchez Pescador en 1864, girada noventa grados para dar frente a la calle del General Ricardos. Aprovecha material pétreo, de madera y forja de la primitiva, que resultó dañada en un accidente.

La cerca original de la finca Vista Alegre en el sector sur de la calle de Clara Campoamor, de ladrillo visto con remate a dos aguas, que incorpora como elementos singulares los arcos y rejas de salida de los arroyos que atravesaban la finca.

El tramo de Ría y el estanque con isla y embarcadero final, enterrados bajo los espacios libres de la parcela del Patronato de Huérfanos del Ejército de Tierra, que fueron elementos muy importantes en el trazado general de los jardines de la quinta, y deben ser preservados por su interés histórico, evitando su ocupación por edificaciones o destrucción.