
Campos electromagnéticos
Un campo electromagnético (CEM) es una combinación de ondas eléctricas y magnéticas producidas por la oscilación o aceleración de cargas eléctricas que se desplazan a la velocidad de la luz y que pueden viajar por el vacío.
La propagación de energía en forma de ondas electromagnéticas se conoce como radiación electromagnética. La mayoría de los CEM son invisibles para el ojo humano, aunque también los hay visibles como el arco iris.
Algunos ejemplos de aparatos que producen campos electromagnéticos son: las líneas de media y alta tensión, los transformadores eléctricos, los electrodomésticos como neveras, secadores de pelo, etc., las pantallas de ordenador, los dispositivos antirrobo y de seguridad, radios, televisores, antenas de telefonía móvil, teléfonos móviles e inalámbricos, hornos microondas, el Wi-Fi o el bluetooth.
Los resultados de los estudios científicos más recientes demuestran que no existen efectos perjudiciales para la salud evidentes si la exposición se produce a niveles por debajo de lo establecido por la normativa. Hay ciertas personas que atribuyen síntomas inespecíficos como dolores de cabeza, trastornos del sueño o fatiga a la exposición a CEM. Se las conoce como personas con hipersensibilidad electromagnética.
El conjunto de todas las formas de energía radiante del universo se conoce como espectro electromagnético. Se divide en regiones con diferentes propiedades según la frecuencia, la longitud de onda y la energía de la radiación.
Sabías que ...
Respuestas sobre los CEM
¿Dónde se encuentran los CEM?
En muchos sitios. Unos existen en la propia naturaleza como la radiación solar, el campo magnético terrestre o los formados durante las tormentas. Otros son fruto de nuevas tecnologías como los generados por ordenadores portátiles, teléfonos móviles, cocinas de inducción y redes inalámbricas.
¿Existen diferentes tipos de CEM?
Sí. El conjunto de todas las formas de energía radiante del universo se conoce como espectro electromagnético. Se divide en regiones con diferentes propiedades según la frecuencia, la longitud de onda y la energía de la radiación.
El término CEM, por lo general, se refiere a las frecuencias electromagnéticas por debajo de la de la luz visible (no las detecta el ojo humano)
El espectro electromagnético abarca:
- Frecuencias extremadamente bajas, como la energía eléctrica.
- Frecuencias más altas, como los infrarrojos, el ultravioleta y la luz visible.
- Frecuencias muy altas, como los rayos X y los rayos gamma.
La frecuencia está relacionada con la longitud de onda: cuanto más corta es la longitud de onda, mayor es la frecuencia.
¿Tienen todos los CEM las mismas propiedades y efectos?
No. La diferencia fundamental entre unas radiaciones electromagnéticas y otras es su frecuencia: cuanto mayor sea la frecuencia, mayor es la cantidad de energía que se transporta.
Se distinguen dos tipos de radiaciones:
- Las radiaciones ionizantes que transportan energía suficiente para romper los enlaces entre moléculas y producir daños en las células, es el caso de los rayos X y rayos gamma.
- Las radiaciones no ionizantes, cuyos campos electromagnéticos son demasiado débiles para romper los enlaces moleculares. En este grupo se encuentran las ondas de baja frecuencia como las microondas, las ondas radioeléctricas, etc. De ahora en adelante, al hablar de CEM nos referimos solo a las radiaciones no ionizantes.
¿Qué aparatos producen CEM?
Muchos de los aparatos que nos rodean producen CEM
Se pueden clasificar en tres grupos en función de la frecuencia de las radiaciones:
- Entre los de frecuencia extremadamente baja están las líneas de media y alta tensión y los aparatos electrodomésticos como neveras, secadores de pelo, etc.
- Los campos de frecuencias intermedias los producen las pantallas de ordenador, los dispositivos antirrobo y los sistemas de seguridad.
- Entre los de frecuencias altas o radiofrecuencias están la radio, la televisión, las antenas de telefonía móvil, los teléfonos móviles e inalámbricos, el Wi-Fi, el bluetooth y los hornos microondas.
¿Es peligrosa para la salud la exposición a los CEM?
Los resultados de los estudios científicos más recientes demuestran que no existen efectos perjudiciales para la salud si las emisiones cumplen los límites fijados en la normativa vigente
Los dispositivos eléctricos y las nuevas tecnologías generan CEM. La presencia de estas nuevas tecnologías (tales como ordenadores portátiles, teléfonos móviles, cocinas de inducción y redes inalámbricas) en todos los ámbitos de la vida actual ha suscitado, en ocasiones, una lógica preocupación sobre los posibles efectos para la salud. Pero la evidencia científica hasta el momento señala que no hay riesgo para la salud pública si las emisiones cumplen los límites establecidos.
¿Estamos cada vez más expuestos a los CEM?
No necesariamente. Los CEM han existido siempre, aunque es indudable que el número de aparatos que los generan está aumentando debido a la demanda creciente de energía eléctrica y a las nuevas tecnologías inalámbricas, especialmente para telecomunicaciones. Los cambios sociales y laborales también propician que en los últimos años haya aumentado la cantidad de dispositivos que los generan.
Sin embargo, los nuevos electrodomésticos, los nuevos teléfonos y demás fuentes de CEM pueden emitir niveles mucho más bajos que los modelos anteriores, lo que podría suponer incluso una disminución de la cantidad de exposición
¿Hay personas especialmente sensibles a los CEM?
Hay ciertas personas que atribuyen síntomas inespecíficos como dolores de cabeza, trastornos del sueño o fatiga a la exposición a CEM. Se las conoce como personas con hipersensibilidad electromagnética. Evidentemente estas inquietudes son legítimas y deben ser tenidas en cuenta, pero por el momento no existen pruebas científicas concluyentes de que la exposición a CEM sea la causa de ninguno de estos síntomas.
Distintos tipos de campos electromagnéticos (CEM)
Publicaciones
Hoja informativa
- ¿Es peligrosa para la salud la exposición a campos electromagnéticos? Comité Científico de Riesgos Emergentes. Comisión Europea
Informes técnicos
- Informe sobre radiofrecuencias y salud (2013-2016). Comité Científico Asesor en Radiofrecuencias y Salud (CCARS)
Telefonía móvil
La telefonía móvil es un servicio para poder comunicarse entre usuarios dentro de un área definida, aunque alguno de ellos se esté desplazando. Para ello se necesita una infraestructura de telecomunicaciones constituida básicamente por el teléfono móvil, la estación base, el controlador de estaciones base y un centro de conmutación.
A continuación encontrará respuesta a 13 cuestiones esenciales sobre telefonía móvil.
Antenas y estaciones base
Una estación base de telefonía móvil está compuesta por una torre o mástil sobre la que se instalan las antenas, con una altura adecuada para cubrir una zona amplia.
El resto de elementos (equipos transmisores y receptores, baterías que garantizan el funcionamiento en caso de corte de energía y los equipos de refrigeración) se resguardan en casetas.
Sí. La telefonía móvil utiliza la energía de las radiofrecuencias para transportar la información, igual que la televisión y la radiodifusión.
Las antenas de telefonía móvil se parecen a las utilizadas para la TV y la radiodifusión.
Porque cada vez hay más demanda de licencias de telefonía móvil y cada antena tiene un número limitado de conexiones simultáneas
Al crecer el número de usuarios, llega un momento en que la estación se congestiona y no se puede cursar llamadas a nuevos usuarios. La única solución es aumentar el número de estaciones base para atender la demanda en esa zona.
Porque cuanto más cerca se encuentre el teléfono móvil de la antena mejor es la cobertura y menor es la potencia a la que tienen que emitir ambos para establecer la conexión.
Alejar las antenas de las ciudades, aún cuando fuera técnicamente posible sin perder la cobertura, no es aconsejable, porque obligaría a las estaciones base a emitir a una potencia muy elevada para dar cobertura en la ciudad
Además, los teléfonos móviles tendrían que emitir también a mayor potencia para poder alcanzar la estación base, lo que haría imprescindible incrementar los niveles de exposición.
No hay evidencia científica, hasta la fecha, de que los CEM asociados a las antenas de telefonía móvil tengan efectos perjudiciales para la salud ni que aumenten el riesgo de cáncer dentro de los límites de emisión establecidos por la legislación.
Tanto la Organización Mundial de la Salud como los Comités científicos y las Autoridades Sanitarias competentes de los países desarrollados han estudiado la cuestión y son unánimes:
No hay ninguna evidencia de que los CEM empleados por las antenas, tanto de telefonía móvil como de radio o televisión, produzcan cáncer
No obstante, y dado que el uso de la telefonía móvil a gran escala es relativamente reciente (15 años), hay que seguir investigando para conocer mejor los mecanismos de interacción entre estos CEM y los sistemas biológicos, y por tanto su posible repercusión en salud.
No se puede establecer una distancia de seguridad fija entre las viviendas y las antenas de telefonía móvil. Depende de las frecuencias utilizadas y de la potencia de emisión, así como de las condiciones urbanísticas.
En general, cuando se habla de que una antena cumple la distancia de seguridad quiere decir que el nivel de exposición al público es inferior al establecido por la normativa vigente.
Esto a su vez quiere decir que es segura en todos los lugares del entorno en donde pueda haber público en general.
No existe evidencia científica de que las antenas, dentro de los límites de emisión establecidos por la legislación, provoquen efectos perjudiciales para la salud.
Vivir en el mismo edificio donde está la antena no supone una exposición adicional, pues las ondas emitidas por las antenas se propagan de forma casi paralela al suelo, no emiten hacia abajo
El Real Decreto 1066/2001 (basado en la Recomendación Europea 1999/519/CE de 28 de septiembre) establece las medidas de protección sanitaria frente a emisiones radioeléctricas.
Antes de autorizar la instalación de una nueva antena, el Ministerio de Economía y Empresa exige un estudio al promotor y después la inspecciona antes de que se ponga en marcha para comprobar que cumple lo indicado en el proyecto.
Además, los operadores de telefonía deben presentar el resultado de las medidas de emisión una vez al año para comprobar que se sigue cumpliendo la normativa.
Por otro lado, a nivel local, es imprescindible la autorización municipal para que empiecen a funcionar.
Sí, el Ministerio de Economía y Empresa controla las emisiones de las estaciones base de telefonía móvil, antes y después de que los operadores de telefonía las pongan en funcionamiento.
Los niveles de emisión son públicos y se pueden consultar en la Web del Ministerio.
En general, el margen de cumplimiento de los límites es muy grande y los niveles medidos están muy por debajo del máximo permitido
Teléfono móvil
El principal efecto biológico por el uso del teléfono móvil es el calentamiento de los tejidos próximos, pero la exposición a estos aparatos es tan baja que el calentamiento que produce es insignificante.
Los efectos biológicos dependen del SAR (Specific Absorption Rate: tasa de absorción específica), del tiempo que se utiliza el teléfono y de la distancia a la antena más cercana.
Los resultados de estudios realizados hasta la fecha indican que no existe evidencia científica de efectos perjudiciales en la salud por uso del teléfono móvil
Con el conocimiento actual no existe evidencia de que el uso de los teléfonos móviles esté relacionado con el desarrollo de ningún tipo de cáncer
Actualmente se mantiene la investigación con numerosos estudios cuyo objetivo es determinar si podrían producirse efectos en la salud menos evidentes a niveles de exposición muy bajos.
Los teléfonos móviles también emiten radiación y como unidad de medida se emplea la tasa de absorción específica o SAR (specific absorption rate).
El SAR indica la energía máxima que puede ser absorbida por el cuerpo y cada teléfono tiene su nivel de SAR. Los fabricantes de teléfonos móviles tienen que informar del nivel de SAR de sus productos.
El nivel máximo de SAR es de 2 W/Kg y debe ser comprobado mediante protocolos internacionales de medida de obligado cumplimiento para todos los fabricantes.
Consultar el nivel de SAR de cada aparato
Publicaciones
- Las nuevas tecnologías de la información y comunicaciones móviles. Preguntas frecuentes. Federación Española de Municipios y Provincias
Teléfono móvil. Sabías que ...
Saber más de telefonía móvil
Entre las diversas formas de contaminación, la contaminación física por radiaciones no ionizantes es un tema de vigente actualidad debido a la importante evolución que la telefonía móvil ha experimentado en el campo de las telecomunicaciones, junto a la existencia de transformadores y la red eléctrica de alta tensión.
El teléfono móvil, que hace pocos años era un aparato sofisticado y reservado a un uso restringido, se ha convertido en un instrumento sin el que es difícil concebir algunos aspectos rutinarios de la vida cotidiana. Sin embargo, se han generado dudas entre la población sobre la inocuidad de las radiaciones no ionizantes y por tanto de las instalaciones que las generan, fundamentalmente las antenas de telefonía móvil.
Por esta razón, los organismos científicos nacionales e internacionales se preocupan cada día con mayor intensidad por la investigación de los riesgos ambientales para la salud y por que la información derivada de estas investigaciones se difunda con la mayor extensión y rapidez, de forma que esté accesible a los responsables de la toma de decisiones. Por su parte, las administraciones públicas deben contribuir a difundir esta información entre los ciudadanos.
Normativa
- Real Decreto 1066/2001, por el que se aprueba el Reglamento que establece condiciones de protección del dominio público radioeléctrico, restricciones a las emisiones radioeléctricas y medidas de protección sanitaria frente a emisiones radioeléctricas.
- Orden CTE/23/2002, por la que se establecen condiciones para la presentación de determinados estudios y certificaciones por operadores de servicios de radiocomunicaciones.
- Real Decreto 123/2017, por el que se aprueba el Reglamento sobre el uso del dominio público radioeléctrico.
10 cuestiones básicas sobre telefonía móvil
Alta tensión y subestaciones eléctricas
Las instalaciones eléctricas de alta tensión son imprescindibles para que la electricidad llegue desde el lugar donde se produce hasta nuestras casas y empresas. Son las encargadas de transportar la electricidad hasta nosotros, por muy lejos que estemos, y en cantidad suficiente para atender nuestra demanda, incluso en momentos de alto consumo.
A continuación encontrará respuesta a una serie de preguntas sobre líneas de alta tensión y subestaciones eléctricas, su relación con la generación de campos electromagnéticos (CEM), el control oficial y el posible impacto en salud.
¿Qué es la tensión eléctrica?
El voltaje, tensión o diferencia de potencial es la presión que ejerce una fuente de suministro de energía eléctrica sobre las cargas eléctricas o electrones de los átomos en un circuito eléctrico cerrado, para que se establezca el flujo de una corriente eléctrica.
A mayor diferencia de potencial sobre las cargas eléctricas o electrones contenidos en un conductor, mayor será el voltaje o tensión existente en el circuito al que corresponda ese conductor. La unidad de medida del voltaje es el voltio (V).
La corriente eléctrica se diferencia, en función del voltaje, entre: baja, media y alta tensión.
¿Cómo llega la energía eléctrica a nuestras casas?
El proceso se inicia con la generación de la energía eléctrica. Posteriormente se transporta y después, modificando la tensión eléctrica o voltaje, se distribuye al consumidor final. Para este proceso se requiere de un conjunto de instalaciones.
Generación: La energía eléctrica se genera en las centrales eléctricas a partir de una fuente de energía primaria (embalses, viento, sol, etc.) y se produce con potencias elevadas de tensión para poder responder a demandas altas de consumo.
Transporte: Antes de su transporte, a la salida de la central eléctrica, se eleva la tensión en una estación transformadora elevadora o subestación eléctrica. Las líneas eléctricas de alta tensión enlazan la central eléctrica con los puntos de consumo. Así, se puede llevar la energía a grandes distancias con la menor pérdida posible.
Distribución: La compañía eléctrica distribuye la energía que llega a nuestras casas y empresas desde las subestaciones transformadoras donde se rebaja la tensión. Las líneas de distribución pueden ser de media tensión o de baja tensión.
¿Qué instalaciones se consideran de alta tensión y por qué es necesario su uso?
Las instalaciones de alta tensión son las que generan, transportan, transforman, distribuyen o utilizan energía eléctrica con tensiones superiores a los 1.000 V (1 kV). Son necesarias para que la electricidad pueda transportarse a largas distancias desde su punto de generación hasta las empresas y nuestras casas, y de tal manera que se puedan atender momentos con alta demanda y con las menores pérdidas posibles.
¿Qué tipo de campos electromagnéticos (CEM) generan las líneas eléctricas de alta tensión y las subestaciones eléctricas?
Las instalaciones eléctricas, además de campos eléctricos, generan campos electromagnéticos. Un campo electromagnético (CEM) es el campo de fuerza creado en torno a una corriente eléctrica. Las cargas que se mueven de forma no uniforme, es decir, con corriente alterna (como la que transporta las líneas eléctricas, el cableado y los electrodomésticos) generan campos electromagnéticos variables. Cuanto más elevado sea el voltaje, más fuerte será el campo que resulta.
Una de las principales magnitudes que caracterizan un CEM es su frecuencia, o la correspondiente longitud de onda. El efecto sobre el organismo de los diferentes campos electromagnéticos varía en función de su frecuencia. Las instalaciones eléctricas generan campos electromagnéticos de Frecuencia Extremadamente Baja (FEB) o, en inglés, Extremely Low Frecuency (ELF) por lo que transmiten muy poca energía
Estos campos electromagnéticos se describen en términos de intensidad del campo eléctrico (E), medida en “voltios/metro” (V/m), y/o inducción magnética o densidad del flujo magnético (B), medida en “teslas” (T).
¿Cómo varía la intensidad de los CEM generados por estas instalaciones?
Disminuye al aumentar la distancia desde la fuente que lo genera.
- En las líneas eléctricas la fuente es la carga acumulada, de modo que el campo eléctrico es mayor para líneas de alta tensión que para otras de menor tensión. Los materiales de construcción y los árboles son una protección eficaz y rebajan la intensidad del campo procedente de las líneas eléctricas situadas en el exterior de las viviendas. En líneas eléctricas enterradas en el suelo, los campos eléctricos generados apenas se detectan en la superficie.
- El campo magnético se origina cuando fluye la corriente eléctrica y su intensidad aumenta con la intensidad de la corriente, disminuyendo rápidamente con la distancia desde la línea. No se ve afectado por la presencia de la mayoría de los materiales y varía con el consumo de electricidad por los usuarios.
¿A qué distancia de una línea de alta tensión o subestación eléctrica se hacen inapreciables los campos eléctricos y magnéticos?
La intensidad del campo disminuye muy rápidamente a medida que aumenta la distancia a los cables conductores de la corriente eléctrica, lo que se constata en las mediciones de valores de campos eléctricos y magnéticos en las instalaciones de Red Eléctrica de España. No hay una distancia estándar para todas las líneas eléctricas en la que los CEM se hagan inapreciables, el valor de esta distancia varía con el tipo de línea, la intensidad que transporta y la demanda de los usuarios.
En el exterior de las subestaciones eléctricas, por lo general, los campos eléctricos y magnéticos más intensos se deben a las líneas de alimentación que entran y salen de la estación.
¿Cuál es el límite legal establecido para los CEM que generan?
No hay un límite legal de exposición de las personas frente a los CEM de 50 Hz en la Unión Europea. En España se toman como valores de referencia, los límites establecidos en la Recomendación del Consejo de Europa de 12 de julio de 1999, relativa a la exposición al público en general a CEM de 0 Hz a 300 GHz, que establece restricciones sobre exposición a campos electromagnéticos y eléctricos:
- 5 kV/m (Kilovoltio/metro) de intensidad del campo eléctrico
- 100 µT (microTeslas) de inducción magnética
Estos límites se basan en efectos a corto plazo y las restricciones básicas se establecen para evitar cualquier consecuencia nociva. Están reconocidos como estándares internacionales por la Comisión Internacional para la Protección contra la Radiación no Ionizante (ICNIRP) y por el Comité Técnico r TC 111 del CENELEC (Comité Europeo para la Normalización Electrotécnica).
¿Qué organismo es el competente en cuanto a riesgos en salud por exposición a las emisiones procedentes de estas instalaciones?
Es el Ministerio de Sanidad el que efectúa la evaluación sanitaria de los riesgos derivados de la exposición a estas emisiones, y establece los límites y pautas sanitarias que deben aplicarse, pudiendo para ello solicitar toda la información necesaria al Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital.
Las Comunidades Autónomas pueden solicitar información al Ministerio de Sanidad y se coordinan con el mismo en lo concerniente a criterios y evaluación sanitaria.
Desde la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid se atienden las demandas de información procedentes de ciudadanos, empresas o administraciones relativas a emisiones de CEM procedentes de este tipo de instalaciones, informando sobre riesgos y protección para la salud pública.
¿Qué organismo es el competente en materia de autorización, inspección y vigilancia de estas instalaciones?
En la Comunidad de Madrid corresponde a la Dirección General de Descarbonización y Transición Energética de la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Agricultura, a través de la Subdirección General de Energía, según Decreto 237/2021, la competencia para ejercer, entre otras, las siguientes funciones en materia de energía:
- La inspección, el control y la vigilancia del cumplimiento de las reglamentaciones técnicas y normas de seguridad sobre las instalaciones y actividades destinadas al suministro de energía o productos energéticos, así como de las instalaciones receptoras y consumidoras de energía o productos energéticos.
- La vigilancia y el control de las actuaciones de empresas y personas dedicadas a la instalación, reparación o mantenimiento de equipos e instalaciones en el ámbito de las instalaciones o actividades destinadas a la producción, transporte, almacenamiento, distribución y comercialización de energía o productos energéticos, así como de las instalaciones receptoras y consumidoras de energía o productos energéticos.
¿Existen inspecciones y seguimientos de las instalaciones de alta tensión?
La reglamentación de seguridad aplicable a las instalaciones eléctricas de alta tensión (Real Decreto 337/2014) y a las líneas de alta tensión (RD 223/2008), recoge los criterios técnicos y establece la obligación de autorización de puesta en servicio y de verificaciones periódicas, al menos cada tres años.
Para las instalaciones de producción, transporte y distribución en alta tensión, cuando su aprovechamiento y ubicación afecte solamente al ámbito territorial de la Comunidad de Madrid, hay establecidos procedimientos para la autorización y puesta en servicio, así como para la verificación e inspección, responsabilidades y régimen sancionador (Decreto 70/2010).
Tras su puesta en servicio todas las instalaciones de alta tensión se someten a verificaciones periódicas por un Organismo de Control autorizado. Además la administración realiza las inspecciones necesarias tanto de oficio como a instancias de parte interesada.
Más información en
Comunidad de Madrid. Puesta en servicio de instalaciones de alta tensión
¿Me debo preocupar si tengo al lado de mi vivienda un centro de transformación eléctrica?
Como se ha comentado antes (ver preguntas 8 y 10), para su puesta en funcionamiento, estas instalaciones han de cumplir con las condiciones técnicas y garantías de seguridad establecidas en la legislación. El primer objetivo de estas normas es la protección de las personas y la integridad y funcionalidad de los bienes que pudieran resultar afectados.
La Dirección General de Industria, Energía y Minas, como organismo competente en el control oficial de estas instalaciones, dispone de los Boletines de Reconocimiento Eléctrico donde se recogen las conclusiones de cada control.
¿Es peligrosa para la salud la exposición a los CEM procedentes de instalaciones de alta tensión?
Los niveles de exposición a CEM procedentes de instalaciones de alta tensión en lugares accesibles al público, están por debajo de los límites establecidos en la Recomendación del Consejo de Europa de 12 de julio de 1999.
Algunos estudios epidemiológicos han sugerido que la exposición a largo plazo a CEM de 50-60 Hz podría estar asociada con pequeños incrementos del riesgo de leucemia infantil, para exposiciones medias diarias por encima de 0,3 - 0,4 μT, es decir, 3 ó 4 veces superiores a las recomendaciones señaladas. Sin embargo, a pesar de docenas de estudios posteriores, revisiones exhaustivas y metaanálisis, hasta ahora no ha podido demostrarse la existencia de una relación causa-efecto entre la exposición a estos CEM y la leucemia infantil.
El SCENIHR (Comité científico sobre riesgos de salud emergentes y recién identificados de la Unión Europea) relaciona algunos de los estudios más relevantes realizados en este campo en su documento Opinion on Potential health effects of exposure to electromagnetic fields. Marzo 2015. Sus conclusiones son que los estudios epidemiológicos existentes hasta ahora no evidencian, por ejemplo, un mayor riesgo de enfermedades neurodegenerativas, ni efectos adversos en el embarazo ni sobre la función reproductiva en humanos.
En resumen, actualmente la investigación científica no ha podido demostrar que la exposición a largo plazo a niveles bajos de LF (Baja Frecuencia) tenga efectos perjudiciales para la salud.
¿Cuáles son los documentos y Webs de interés?
- OMS Campos electromagnéticos y salud pública. Exposición a campos de frecuencia extremadamente baja (Nota descriptiva N° 322 junio de 2007).
- Comunidad de Madrid. Cómo tramitar la puesta en servicio de instalaciones de alta tensión.
- SCENIHR (Comité científico sobre riesgos de salud emergentes y recién identificados (Unión Europea). SCENIHR opinión Campos ELF-Salud, Opinion on Potential health effects of exposure to electromagnetic fields. Marzo 2015.
- ICNIRP WEB Comité Internacional para la protección de Radiaciones No Ionizantes.
- GREEN FACTS Campos electromagnéticos de líneas eléctricas, cableado y electrodomésticos.