
Iglesia parroquial de la Purísima Concepción en Bustarviejo
Bien de Interés Patrimonial de la Comunidad de Madrid
La Iglesia Parroquial de la Purísima Concepción
La Iglesia Parroquial de la Purísima Concepción constituye un notable ejemplo de templo rural de sobriedad constructiva, reflejo de la evolución histórica de la población de Bustarviejo, en la que se ubica.
Elementos como su ábside románico inercial del siglo XIV, así como restos de pintura mural de temática bélica, realizada a mediados del siglo XIV o principios del XV en estilo gótico lineal; confieren a la iglesia una especial significación histórica y artística que justifica su declaración como Bien de Interés Patrimonial.
Los trabajos arqueológicos efectuados en la iglesia han permitido conocer la existencia de un cementerio de época moderna y contemporánea, que se extendía por casi todo el edificio. Situado bajo este, en la zona nororiental del actual templo, apareció una necrópolis rupestre de época medieval, con fosas excavadas en roca que por su tipología puede datarse en los siglos XII, XIII y XIV, y que estaría situada en el exterior de una primitiva iglesia, de la que se han descubierto dos tramos de muros bajo la capilla de la nave norte.
En el presbiterio, bajo los arcos que comunican con las capillas laterales, las excavaciones han detectado estructuras que esponden a un edificio de tipología románica, sin que se pueda determinar con precisión su cronología. Considerando la existencia de restos de pinturas murales aparecidas en el tramo más oriental del muro de la nave lateral norte, fechadas hacia 1400 o 1450, esta datación permite situar la construcción de la cabecera durante el siglo XIV, manteniénd se hasta entonces la primitiva iglesia asociada al cementerio medieval.
Esta tipología responde a unos planteamientos estilísticos propios de un románico inercial retardatario, que continuó repitiendo los mismos modelos en fechas avanzadas prolongándose hasta el siglo XIV e incluso XV, fundamentalmente en el ámbito rural, como las cercanas iglesias de Prádena del Rincón, Venturada o Torremocha.
La parte de los restos de pintura mural que se localizan en el muro norte se puede considerar como uno de los elementos más destacados de la iglesia, en cuanto a su valor artístico e histórico. Aunque muy perdida, puede identificarse una escena bélica sin que se pueda interpretar con mayor precisión, debido a los escasos restos conservados. Las pinturas han sido estudiadas por investigadores especializados que las sitúan unos a mediados del siglo XIV otros hacia 1400. No obstante, constituyen el único ejemplo de pintura mural de tema militar y época medieval que se conserva en la Comunidad de Madrid, y uno de los escasos ejemplos en Castilla.
En la escena se puede reconocer un capelo cardenalicio y una cruz de la Orden Militar de Calatrava, que pudieran ser llevados por un personaje eclesiástico actualmente desparecido. Tras el capelo se conservan restos de una inscripción que hace referencia al comitente «m(an)do fazer ... el moço», por tanto, con una intención conmemorativa del hecho en el que el personaje participa. Junto a esta representación, se observan restos de figuras ataviadas con indumentaria militar característica del siglo XV, sobre un fondo donde se puede ver un recinto amurallado, lo que podría figurar un combate. Los escudos que portan, denominados adargas, son de origen musulmán, aunque fueron adoptados por los cristianos desde el siglo XIV.
Algunos autores han relacionado la escena con la campaña de Alfonso XI frente al rey de Granada que culminó con la toma de Algeciras en 1344, por lo que quizás el comitente fuese algún personaje que intervino en ella. Para otros, la escena podría interpretarse como la plasmación de la constante reivindicación del arzobispo de Toledo por conseguir este territorio de la Tierra de Segovia, que los segovianos defendieron frente a las tropas toledanas.