Arquitectos de Madrid: Juan Guas
A lo largo del s. XV se desarrolla en la arquitectura española el denominado gótico hispano flamenco o isabelino (en referencia a la reina Isabel La Católica), un derivado local del gótico flamígero europeo combinado con elementos mudéjares, tan presentes en el área de Toledo.
Breve reseña biográfica
Juan Guas (Saint-Pol-de-Léon, Bretaña, (Francia), 1430? – Toledo, 1496)
Arquitecto real y escultor, Juan Guas, fue una de las figuras más representativas del estilo isabelino y responsable de muchas de las construcciones civiles y religiosas de referencia tanto en España como en Madrid.
Nacido en la Bretaña francesa hacia 1430, su padre Pedro Guas también fue arquitecto y es precisamente junto a este y en Toledo donde pasa la mayor parte de su vida y donde realiza la decoración de la puerta de los Leones.
Fue maestro mayor de las catedrales de Ávila, Segovia y Toledo, donde por patrocinio de la reina Isabel comienza a levantar el monasterio y el panteón real de San Juan de los Reyes.
Guas se encargará de realizar el modelo y la primera etapa de construcción de la Iglesia de la Asunción de Nuestra Señora en Colmenar viejo. A su muerte, en 1496, las obras quedarán vinculadas a autores como Hannequín de Cuéllar o Rodrigo Gil de Hontañón.
Obra
Guas como arquitecto real, impulsa la construcción del monasterio benedictino de Santa María de El Paular en Rascafria, centro vinculado desde su nacimiento con la casa Trastámara a través de Juan I de Castilla (bisabuelo de la reina Isabel). Él donará a los cartujos el terreno, estableciendo allí el primer monasterio de la orden en Castilla.
Además del recinto hay dos elementos especialmente reseñables: el retablo mayor de la iglesia, en alabastro policromado, que también parece ser obra de su taller y no un encargo proveniente de Génova, como se mantuvo en un principio, así como la serie de 52 pinturas que los cartujos encargaron a Vicente Carducho sobre la vida del fundador de la orden, san Bruno de Colonia.
Guas fue también uno de los arquitectos de referencia de la familia Mendoza, en algunas de cuyas propiedades levanta importantes construcciones civiles y religiosas. Entre ellas el Palacio del Infantado de Guadalajara y el Castillo de Manzanares el Real. El proyecto encargado por Iñigo López de Mendoza y de la Vega concibe el edificio como un palacio que muestre la riqueza y el prestigio del linaje familiar.
En el edificio contrasta un exterior de aspecto militar, con planta cuadrangular y rematado por tres torres cilíndricas y una cuarta como torre del homenaje, y un interior, formado por amplios salones en torno a un patio porticado en dos alturas, recorrido por galerías en los que vemos los motivos de armas de las casas vinculadas al ducado del Infantado. En la parte inferior, se conservan los restos de una capilla gótica.
Posiblemente realiza también la iglesia parroquial de Nuestra Señora de las Nieves en Manzanares el Real. Un espacio abierto, en tres naves, mucho más ancha la central, y presbiterio en alto, cubierto de bóveda de terceletes, con detalles múltiples (capiteles, barandas, estelas).
A finales del siglo XV bajo el patronazgo de la familia Mendoza, señores de la comarca del Real de Manzanares, se construye la Iglesia de la Asunción de Nuestra Señora que destaca por su imponente fábrica y airosa torre, donde contrasta la sobriedad de su fábrica con la rica ornamentación de las portadas.
La torre se alza a los pies de la iglesia en el lado Sur, sobresaliendo del cuerpo del edificio. Es de sillería bien labrada a diferencia del resto de la fábrica. Responde al modelo habitual en Castilla: prismática cuadrangular coronada por un chapitel.
La torre fue realizada por Juan Guas junto a su taller de canteros . El templo que es uno de los mejor conservados de esta época ha sido restaurado por la Comunidad de Madrid.