La Unidad de Apoyo a Residencias (UAR) de la Dirección Asistencial Noroeste, junto al Centro de Salud Isla de Oza, ha realizado talleres de actividad física en los centros residenciales que asiste, con el objetivo de promover un estilo de vida activo entre las personas mayores.
Cada taller comienza con una breve charla en la que se destacan los beneficios de la actividad física, como la mejora de la movilidad y el bienestar emocional. Después, los participantes realizan una serie de ejercicios y estiramientos adaptados a sus capacidades, fomentando un ambiente inclusivo y motivador.
La actividad culmina con una divertida gincana que incluye juegos como el pimpón y el tiro a canasta, lo que no solo estimula la actividad física, sino también la interacción social entre los residentes.
Con estas iniciativas, se contribuye significativamente a mejorar la calidad de vida de los mayores, promoviendo un envejecimiento activo y saludable y asegurando un enfoque integral en el cuidado de los ancianos.
