Restauración del lienzo: San Bernardo abrazando al Cristo Crucificado

La obra presentaba un marco con buen estado de conservación, a excepción de ligeros desgastes y pérdidas en la decoración de la talla, con ausencia de dos de los roleos de acanto de las esquinas. Además, sufría oxidación de los barnices protectores, acumulación de polvo y la fijación sobre la superficie de un gran número de excrementos de mosca.

El bastidor se conserva íntegro, con los ensambles en estado funcional y sin problemas estructurales, si bien tenía incrustada en su superficie una densa capa de suciedad.

Con respecto al lienzo, se observaron numerosos deterioros y roturas, que dieron lugar a pérdidas de preparación y pintura y que se han intentado paliar mediante la aplicación de parches de refuerzo. La pintura presentaba una suciedad bastante acusada, además de numerosos restos de adhesivos de parches anteriores, craquelados y levantamientos de los bordes en forma de crestas. Asimismo, en el pasado se realizaron limpiezas  abrasivas que no favorecieron la conservación de la pintura.

Las restauraciones anteriores del lienzo han sido, en ocasiones, poco adecuadas invaendo la pintura original y produciendo visibles abolsamientos que causaron pérdidas de policromía. En algunos casos los repintes se encontraban cuarteados y parcialmente perdidos.

En el proceso de restauración, se han realizado las siguientes actuaciones:

• Desmontaje del sistema de enmarcado tras la extracción de los clavos que unían lienzo y marco.
• Limpieza superficial mediante microaspirado por el anverso y el reverso de la pintura, bastidor incluido y protección provisional de la película pictórica mediante el procedimiento de empapelado. Tras separar el bastidor del lienzo, se realizó una limpieza mecánica en profundidad.
• Eliminación de las antiguas intervenciones realizadas sobre el soporte, sentado de la capa pictórica, reintegración de las pérdidas de soporte y consolidación del mismo. sustituyendo el sistema de bastidor por el de soporte rígido.

• Desempapelado y limpieza profunda de la película pictórica y eliminación de barnices oxidados. El proceso de limpieza desveló la firma del artista, dado que el lienzo había sido sometido a un repinte generalizado.
• Reintegración de la materia pictórica siguiendo los principios de reversibilidad, notoriedad y mínima intervención y protección con barniz recuperando las saturaciones originales.
• Tratamiento del marco mediante la limpieza, consolidación y reintegración del dorado y protección final. En la posterior colocación del marco se han empleado materiales más acordes con la preservación de la obra como pletinas de metal y tornillos, sustituyéndose por el tradicional sistema  de clavos colocados al bies.

Con los tratamientos aplicados, tanto el lienzo como el marco, se han recuperado las propiedades originales de la obra, permitiendo apreciar unos valores de gran relevancia histórico-artística.