
El conjunto histórico artístico de la villa de Torrelaguna
Bien de Interés Cultural
Texto cabecera
En el Valle Medio del Jarama, al nordeste de la Comunidad de Madrid y lindando con Guadalajara, Torrelaguna es villa famosa, además, por ser cuna del cardenal Francisco Jiménez de Cisneros y lugar de residencia de María Toribia, que luego sería Santa María de la Cabeza, esposa de San Isidro Labrador. Es Conjunto Histórico Artístico Nacional desde el año 1974.
La naturaleza también ha sido generosa con Torrelaguna, adornándola con monte bajo -rico en espliego-, romero, tomillo, jara y retama, pero también de álamos, pinos y encinas. No por casualidad, Torrelaguna fue primera sede del Canal de Isabel II.
Su patrimonio monumental es considerable: Iglesia Parroquial de Santa María Magdalena (S.XV), Ermita de San Sebastián (s. XV) o Palacio Arteaga o del Infantado (s. XVII-XVIII), entre otros, así lo evidencian.
Imágenes
La villa de Torrelaguna ofrece en sus alrededores, ya desde tiempos prehistoricos, asentamientos humanos, de los que asimismo aparecen vestigios de las épocas ibérica y romana. Pero fue en la Edad Media, y como enclave fortificado sobre el valle del Jarama, cuando Torrelaguna adquirió el emplazamiento y forma que hoy presenta.
Información General
El primer dato histórico que se posee es el de su cesión, hecha en mil ochenta y cinco, por Alfonso VI, en favor del Arzobispo de Toledo don Bernardo, por los servicios que le habia prestado en la toma de Alcalá. En mil trescientos noventa, Juan II la segrega de la Mitra toledana y la convierte en villa real. Enrique II confirmó los privilegios dados anteriormente y otorgó otros nuevos y Felipe II cedió la jurisdicción y señorio de Torrelaguna a la misma villa. Con la guerra de la Independencia sufre la destrucción de sus fortificaciones, de las que apenas hoy quedan restos del Convento de los Franciscanos. Se puede apreciar lo que fueron dos puertas, una en la plaza de Montalbán y otra llamada puerta del Cristo de Burgos.
Dentro del recinto existen numerosas casas y palacios de noble construcción, la mayoria blasonados, como el de Juan de Salinas, obra renancentista de la que sólo queda la fachada que da a la plaza de Montalbán. En la placeta formada por la unión de la calle de la Montera con la de Burgos hay otras dos casas del mismo estilo, y son dignas de mención también algunas de tipo popular de estructuras de madera, principalmente de las calles Poeta Juan de Mena y del Hospital. El conjunto de mayor emotividad e interes monumental es la plaza Mayor, en la que se encuentran las dos construcciones más notables de Torrelaguna: la iglesia parroquial y el Ayuntamiento. La iglesia consagrada a la Magdalena, es obra del siglo XIII, renovada por el Cardenal Cisneros en el XV; su fábrica es de sillares graníticos bien tallados y contiene un verdadero tesoro artistico, Su aspecto exterior es de una gran riqueza de volúmenes, principalmente en el lado de la Epístola, con puerta de estilo gótico florido, con elementos renancentistas y flanqueada por dos volúmenes cilíndricos. La fachada principal, a la que se adosa la torre, es sobria y armonjiosa. Dos sencillos contrafuertes, terminados en pináculos, la dividen exteriorizando la disposición interior en tres naves y enmarcando la gran pueerta con adornos góticos. En su interior, la iglesia es amplia y armoniosa y consta de tres naves. El retablo del altar mayor es barroco y data de mil setecientos cincuenta y dos. En el altar de la nave del Evangelio se encuentra un Cristo de profunda expresión, llamado de la Salud, que fue regalado por Alejandro VI a los Reyes Católicos. Las capillas de ambos lados contienen obras de arte de gran interes y sepulcros de conocidos nobles y caballeros. Merece destacarse la de San Felipe, en la que se encuentran los restos del que fue famoso poeta castellano Juan de mena, muerto en esta villa.
La otra notable construcción de este conjunto monumental es la casa del Ayuntamiento, noble edificio típico castellano, con soprtales y una galería en el piso superior, sostenido todo por pilares y con una puerta ojival.
En el centro de la plaza se alza una sencilla cruz sobre una columna de granito, que señala el solar en que naciera el que fue Cardenal Arzobispo de Toledo y regente de Castilla, Francisco Ximénez de Cisneros, cuya grandiosa obra tanto se aprecia en esta villa, llena de sabor y de recuerdos históricos.
Galería de imágenes
Fotografias: web de Turismo de la Comunidad de Madrid, oficina de turismo de Torrelaguna (Carlos Suarez, Guillermo Wolfram y Juan Guerra) y Dirección General de Patrimonio Cultural (Juan Carlos Marín Lera)