



Así fue Arqueólogos por un día 2020
Arqueólogos por un día se enmarca en los programas educativos desarrollados por la Dirección General de Patrimonio Cultural de la Comunidad de Madrid con objeto de favorecer la transmisión de los conceptos y valores patrimoniales y dar a conocer las labores de investigación y conservación que se efectúan en torno al patrimonio histórico.
En 2020 tuvo lugar una nueva edición de la actividad organizada por la Dirección General de Patrimonio Cultural en colaboración con los Ayuntamientos de Alcalá de Henares y de Hoyo de Manzanares, en el marco de los objetivos pautados en el Plan de Educación Patrimonial de la Comunidad de Madrid.
La situación sanitaria marcó una edición en la que la seguridad de los participantes y de las personas que la desarrollaban se convirtió en elemento fundamental en su diseño y ejecución para garantizar un acceso seguro a esta actividad de educación patrimonial.
La actividad
Arqueólogos por un día favorece el aprendizaje intergeneracional, en la medida que adultos y niños, de 8 a 14 años, colaboran desarrollando un proceso arqueológico completo, desde la localización de un yacimiento al envío de los materiales al museo. Los participantes trabajan activamente en todos los aspectos relacionados con la disciplina arqueológica, durante un tiempo aproximado de tres horas.
Su objetivo es sensibilizar a los ciudadanos para que sientan suyo este patrimonio arqueológico y aprendan a cuidarlo y a disfrutarlo, al mismo tiempo que logran un aprendizaje global sobre la labor arqueológica, en la medida que la actividad favorece una mejor comprensión del yacimiento y de su contexto.
La actividad
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Patrimonio seguro
Para garantizar la seguridad de todos los participantes se adaptó la actividad a las nuevas necesidades existentes como consecuencia de la situación sanitaria, reduciendo el aforo de los menores y siendo acompañados por un máximo de un solo adulto responsable por cada menor.
Asimismo se estableció el uso obligatorio por todos los participantes y los monitores de mascarillas que cubrían nariz y boca.
La organización proporcionó gel hidroalcohólico a la entrada y salida de las instalaciones y todos los asistentes debieron higienizar sus manos siempre que se consideró oportuno durante el desarrollo de la actividad.
Los elementos comunes fueron igualmente higienizados con disolución de lejía cuando se consideró oportuno, en todo caso, siempre se realizó una vez terminada la actividad.
Los materiales de uso personal proporcionados por la organización se entregaron desinfectados con disolución de lejía y embolsados individualmente.